¡Hola, hola!
¿Cómo lleváis la combinación del horno y el verano?
Yo no abandono el horno, ni estando a los grados que estamos...
La verdad es que después del éxito del bizcocho de leche condensada y limón... Ya tenía excusa para reinventar esta receta.
Lo cierto es que, para tener todos los ingredientes dulces que tiene, no es un bizcocho que empalague demasiado.
Aunque también es cierto que a mí me encantan las cosas dulces y cuanto más, mejor.
Eso sí.
Si no queréis rellenarlo, no lo hagáis.
No varía nada respecto a los ingredientes del bizcocho en sí, tan sólo habría que eliminar la nocilla y los mini lacasitos del relleno.
Escrito esto...
Vamos con los ingredientes y la preparación.
Mis catadores personales, no dejaron ni miga del bizcocho, de lo bueno que salió.
La combinación dulce de la leche condensada y el cacao junto con el sabor refrescante que le aporta el limón, es espectacular.
Y al corte, era de lo más bonito, original...
Y riquísimo...
El bizcocho queda super esponjoso, de verdad.
Y si le ponéis la nocilla antes de que se enfríe del todo...
Ésta se derrite y queda incluso mejor...
Espero que lo probéis y me digáis que os parece.
Un beso enorme,
May.
¡Qué pinta tan buena y qué bien explicado todo!
ResponderEliminarMe quedo como seguidor y te invito a conocer mi blog: www.dulceriasconsorpresa.com
Un beso,
Adrián.